Central térmica situada en el polígono industrial, concretamente en la Avenida de la Cruz Roja Española 11 D.
La Red requiere de una gran longitud de zanja, en la que se enterrará la tubería de distribución, cubriendo casi la totalidad de la ciudad de Cuenca, a excepción del barrio del Casco Antiguo, con especial densidad prevista en las zonas comprendidas en la Zona Hospital y Universidad, Zona Princesa Zaida y parque San Julián, Zona Cañadillas, Barrio Fuente del Oro, Barrio de Santa Teresa y de la Paz, Barrio de Tiradores, Zona San Fernando y Ars Natura, Barrio de las 500 y San Antonio, Barrio de Casablanca, Zona la Hípica, Zona Santa Mónica y siglo XXI. Con previsión de llegar al nuevo Hospital de Cuenca.La extensión total de la Red rondará los 25 Kms.
Todo ello se mantendrá con gracias a la biomasa procedente de, entre otros lugares, los montes municipales. Cuenca capital cuenta con más de 53.000 hectáreas de montes públicos propiedad del Ayuntamiento, y la provincia en su conjunto con más de 800.000 hectáreas arboladas, lo que ayuda a la producción de biomasa y su consumo.
La Red de Calor de Cuenca se compone de 28 MW de potencia, dos calderas de 21 MW y 7 MW respectivamente, que darán calor para el servicio de calefacción y agua caliente sanitaria a través de energía térmica de biomasa a los vecinos además de edificios públicos y no residenciales.
El consumo previsto del conjunto de la Red es de 80.000.000 kWh anuales y 25.000 toneladas de astilla al año.
Cuenca reducirá sus emisiones de CO2 a la atmósfera entorno a 20.000-25.000 toneladas anuales y, además, el mantenimiento y suministro de la infraestructura supondrá la creación de 40 empleos directos e indirectos.
Dará servicio de energía térmica para agua caliente y calefacción a 7.700 viviendas, además de edificios públicos y no residenciales.
Entre 30 y 35 millones de euros de proyecto consolidado.
Centro de control 24 horas para atención de alarmas o emergencias. Único sistema de avisos con asistencia permanente.
Conecta a todos sus clientes a través de fibra óptica. Optimización del funcionamiento de la Red, detección precoz de averías.
Depósito de inercia de 10.000 m3 y 245 MWh de energía que, junto con un doble sistema de rebombeo, consiguen llevar el calor a todos los puntos de la Red.
Reducción media mínima del 10 por ciento en la factura de la Comunidad de Propietarios en calefacción y ACS.