Más de 1.200 viviendas en Cuenca ya están en disponibilidad de ser conectadas a la Red de Calor. La promotora del proyecto, REBI, ha levantado la estructura de la central de energía térmica que es el origen de la Red, ubicada en la travesía Avenida de Cruz Roja Española 11, D, al lado del concesionario de vehículos Ford; se pueden observar los paneles, las correas y las cerchas que dan forma a la instalación.
También ha comenzado el montaje de los equipos de última generación, por un lado la caldera de biomasa más grande de las dos de las que se compone la central, que tiene una potencia de 21 MW; por otro lado también se ha colocado el economizador, los ciclones, y los cuatro colectores.
Igualmente se construye el depósito de inercia de 10.000 metros cúbicos que asegurará el abastecimiento durante los picos de demanda de energía, y que se está acabando de aislar y rematar. La segunda caldera, de 7 MW llegará en los próximos días. La central incorporará una instalación fotovoltaica de 100 kilovatios para autoconsumo.
El campo termosolar de concentración se encuentra en proceso de excavación, supondrá la hibridación de 1,2 MW de energía térmica producida en 4.000 metros cuadrados de superficie. Esta hibridación será pionera en España en las Redes de Calor. No solo eso, sino que la de Cuenca también incorporará la recuperación de energía a través de bombas de calor conformando una Red de energía sostenible con diferentes focos de inyección de energía térmica producida. Se prevé que la central pueda iniciar sus pruebas a finales del mes de junio para comenzar a dar servicio a los vecinos.
La obra de la Red también continúa en la calle. El jefe de Obra de la Red de Calor, Antonio Ruiz, explica que “los tubos preaislados están ya soterrados en las calles Santo Tomás, A-40, calle Radio Nacional de España, y Priego, después discurre por varias parcelas privadas y llega a la central. En este momento nos mantenemos a la espera de que el ayuntamiento nos conceda la licencia para actuar en la avenida Castilla la Mancha y Avenida de los Reyes Católicos. En los próximos días también comenzaremos los trabajos al otro lado del puente, en la zona de Urbanismo”. La energía producida a partir de astilla de madera y del reto de focos de generación sostenible se distribuye desde la central a través de agua caliente a 90 grados centígrados por los tubos aislados que recorren el subsuelo de la capital. El circuito, cerrado, conectará todos los edificios que deseen incorporar energía renovable, y el agua retornará de nuevo a la central, donde volverá a recoger energía. Se evitará la emisión a la atmósfera de 25.000 toneladas de CO2 al año.
El técnico responsable de la Comercialización en Cuenca, Roberto Gómez, apunta que “la acogida del proyecto está siendo muy buena por parte de los vecinos, ya superamos las 1.200 viviendas adheridas, la Cooperativa Ciudad Encantada, la zona de Escultor Jamete, calle Diego Jiménez y la zona del hotel Torremangana. Y cada día son más las reuniones y contactos que tenemos, nos piden información y estamos muy satisfechos del ritmo al que crece el desarrollo”.
Los usuarios que se conecten a la Red dispondrán de una reducción media mínima del 10 por ciento en la factura de la Comunidad de Propietarios en calefacción y agua caliente sanitaria (ACS), pudiendo llegar hasta un 50 por ciento. “La estabilidad en el precio frente a la especulación de los combustibles fósiles es otra de las ventajas de los clientes de la Red de Calor, que dispondrán de un contador de kWh (kilovatios hora) de última generación en el intercambiador de placas y una facturación de kWh térmicos útiles consumidos”.
Las ventajas técnicas de incorporar la Red a la comunidad de propietarios son importantes también, “como el hecho de que los vecinos dejan de almacenar combustible fósil, desparecen ruidos, olores y las descargas desechando cualquier riesgo de explosión o incendio. También se reduce el gasto en averías y en el consumo eléctrico de los quemadores”. Las calderas de gas y gasóleo de las instalaciones conectadas quedan en stand-by. La sala de calderas del edificio incorpora un elemento nuevo llamado subestación que se encargará de hacer el trasvase de la energía desde el agua del circuito de la Red al agua del circuito de la comunidad.
Los conquenses que decidan utilizar la energía verde en lugar de su combustible fósil para calentarse no deberán pagar ninguna derrama ni hacer ningún desembolso inicial puesto que la conexión está bonificada al cien por cien, con una obra mínima en su sala de calderas, solo pagan por la energía que consumen. “Los vecinos que quieran más información pueden acudir a la oficina situada en la calle Antonio Maura, 3 en el Centro Comercial Cuatro Caminos, local 36”.