Otros 28 vecinos de la capital han comenzado a recibir la energía térmica de biomasa que proporciona la Red de Calor de Soria, se trata de los propietarios de la Comunidad de Aduana Vieja 8.
Han decidido por mayoría dejar de utilizar un combustible fósil en su calefacción como es el gasóleo para subirse al tren de las energías renovables y se han conectado a la Red de Calor. De esta manera, cada año van a evitar la emisión de 103 toneladas de CO2 a la atmósfera contribuyendo a mejorar la calidad del aire de la ciudad.
“El camino hacia el futuro en el abandono de los combustibles fósiles ya es una realidad y no tiene marcha atrás y los sorianos también lo saben, saben que si continúan utilizando calderas de gas y gasóleo pronto tendrán que pagar por lo que contaminan”, explica el responsable comercial de la Red de Soria, Ángel Sáinz.
Puntualiza que “hace unos meses se ha celebrado la Cop28, la Cumbre del Clima, y se ha cerrado un acuerdo histórico que abre la senda para dejar atrás los combustibles fósiles”. El texto pactado por los 200 países presentes en Dubái pone el foco en los principales responsables de la crisis climática: el petróleo, el carbón y el gas.